447 menores de edad rescatados por el Ejército fueron entregados al ICBF

El Ejército Nacional entregó a la protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) a 447 niños, niñas y adolescentes que habían sido reclutados por la fuerza por grupos armados ilegales y estructuras criminales vinculadas al narcotráfico. Estos menores fueron rescatados en operaciones militares realizadas durante 2024, como parte de los esfuerzos del Gobierno por combatir el reclutamiento forzado de menores.

El caso más reciente tuvo lugar el 3 de enero de 2025, en el departamento del Tolima, donde 19 menores, con edades comprendidas entre los 13 y los 17 años, fueron rescatados por tropas de la Sexta Brigada del Ejército. Los adolescentes, provenientes de diversas regiones del país, habían sido reclutados por disidencias bajo el mando de alias Iván Mordisco, quienes en muchos casos utilizaron engaños a través de redes sociales para captarlos.

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Durante el año 2024, el Ejército realizó operativos similares en diez departamentos de Colombia, donde se destacó el caso de Cauca, con el mayor número de menores rescatados (72), seguido por Antioquia con 68, Valle del Cauca con 39, y Chocó y Meta con 29 menores recuperados en cada uno de esos departamentos.

Adicionalmente, el Ejército logró el rescate de 210 menores en regiones como Huila, Nariño, Tolima, Santander y Norte de Santander, como parte del Plan de Campaña Operacional Ayacucho 2023-2026 Plus. Este plan tiene como objetivos centrales proteger a la población civil, debilitar las capacidades de las amenazas armadas y fortalecer la gobernabilidad en las zonas más vulnerables del país.

El impacto de estas operaciones ha sido significativo no solo por el rescate de menores, sino también por el rescate de 54 personas y la liberación de 86 víctimas de secuestro extorsivo, reafirmando así el compromiso de las Fuerzas Militares con la protección de los derechos humanos y la seguridad ciudadana.

Las acciones emprendidas por el Ejército son esenciales para garantizar la seguridad y la protección de la población, además de contribuir a la estabilidad del país. La recuperación de los menores reclutados ilegalmente también representa un avance significativo en la defensa de los derechos de la niñez y en la construcción de un entorno más seguro para las comunidades.

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Con estos logros, el Ejército Nacional no solo cumple con su misión constitucional de salvaguardar la soberanía nacional, sino que también refuerza su compromiso de velar por el bienestar de la población civil, especialmente de los más vulnerables. El rescate de estos menores se convierte en un símbolo de esperanza en la lucha por un futuro más pacífico para Colombia.