Aunque la candidata Paloma Valencia aceptó reunirse con quienes conforman la Gran Consulta por Colombia, indició que será su partido Centro Democrático quien defina si participa o no en la consulta.
lunes, 22 de diciembre de 2025
Aunque la candidata Paloma Valencia aceptó reunirse con quienes conforman la Gran Consulta por Colombia, indició que será su partido Centro Democrático quien defina si participa o no en la consulta.
Los organizadores de la Gran Consulta por Colombia extendieron una invitación formal a Paloma Valencia, senadora y recientemente elegida como candidata presidencial del Centro Democrático, para que se integrara a la consulta. La reunión con los precandidatos de la consulta se realizó el 21 de diciembre de 2025, y en ella se le transmitió la bienvenida a dicho proceso.
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Valencia confirmó públicamente, a través de sus redes sociales, que se reunió con los integrantes de la Gran Consulta y agradeció la invitación y el esfuerzo por la unidad. Sin embargo, enfatizó que la decisión sobre su participación definitiva aún no estaba tomada, ya que debía consultarla con su partido y con figuras clave dentro de su propia organización política, incluyendo al expresidente Álvaro Uribe Vélez.
Pese a la necesidad de consultas internas, Paloma Valencia manifestó interés en formar parte de la consulta, reconociendo la capacidad de los demás aspirantes y dejando abierta la posibilidad de unirse al bloque que busca unificar la oferta de centroderecha para la contienda presidencial.
La posible aceptación de Valencia se explica no solo por la ampliación de apoyos, sino también por la oportunidad de consolidar una opción común que pueda competir con fuerza en las primeras vueltas de campaña, donde actualmente otros sectores, incluidos candidatos independientes o de centro, mantienen una presencia significativa.
La decisión final del ingreso de Valencia dependerá de discusiones internas dentro del Centro Democrático. El liderazgo uribista —incluido el expresidente Álvaro Uribe— juega un rol destacado en esa deliberación, dada su influencia en las decisiones estratégicas del partido y la construcción de alianzas. Aunque el propio expresidente ha indicado por el momento, que respeta cualquier decisión que tome la candidata de su partido.
La participación de Paloma Valencia podría reconfigurar las dinámicas internas de la consulta, dado que proviene de una fuerza política con una base de votantes consolidada y con un aparato político significativo en muchas regiones del país. Su adhesión podría atraer sectores del electorado conservador y tradicional hacia el conjunto de candidatos de la Gran Consulta.
La presencia de una figura como Valencia también plantea desafíos de cohesión interna, debido a diferencias ideológicas y estratégicas entre los integrantes actuales de la consulta, que incluyen desde moderados hasta sectores más centristas. Esto obliga a negociar acuerdos programáticos y prioridades políticas para evitar tensiones durante el proceso electoral intermedio.
Los aspirantes que ya forman parte de la Gran Consulta por Colombia incluyen a Vicky Dávila, Juan Manuel Galán, David Luna, Juan Daniel Oviedo, Mauricio Cárdenas, Aníbal Gaviria y Daniel Palacios. Cada uno de ellos representa sectores distintos del centro y la centro-derecha, con votantes potenciales que varían en sus prioridades y enfoques hacia temas nacionales.
Hasta ahora, los primeros sondeos indican que la consulta suma alrededor de 8% en intención de voto entre los participantes, un porcentaje que —si bien modesto en este momento— podría crecer dependiendo de la gestión de la campaña, la consolidación de la unidad y la visibilidad que logren en los meses previos a marzo de 2026.
Si, por el contrario, Paloma Valencia u otros sectores importantes optan por competir fuera de la consulta, el bloque de centroderecha podría fragmentarse, reduciendo su capacidad de competir eficazmente contra candidatos con mayor reconocimiento o estructuras más amplias, tanto de izquierda como de centro o liberalismo moderado.
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En el contexto de la campaña presidencial de 2026, la posibilidad de una candidatura unificada de centroderecha a través de la Gran Consulta por Colombia representa una apuesta por concentrar recursos, votantes y visibilidad en un solo aspirante. La eventual participación de Paloma Valencia, considerando su perfil y trayectoria política, podría influir significativamente en la configuración del espectro competitivo hacia la primera vuelta, impactando tanto la percepción pública como la dinámica de alianzas en el escenario político nacional.