Aunque muchos sectores están esperanzados en este cese al fuego entre Israel y Hamás, otros creen que al final no se cumplirá por presiones internas en Israel.
Aunque muchos sectores están esperanzados en este cese al fuego entre Israel y Hamás, otros creen que al final no se cumplirá por presiones internas en Israel.
Después de más de 15 meses de conflicto entre Israel y Hamás, se ha alcanzado un acuerdo de cese al fuego en la Franja de Gaza. Este acuerdo, mediado por Qatar, Egipto y Estados Unidos, busca poner fin a las hostilidades y establecer un camino hacia la paz en la región.
El acuerdo se implementará en tres fases. La primera fase consiste en una tregua inicial de seis semanas, durante la cual Hamás liberará a 33 rehenes israelíes secuestrados en el ataque del 7 de octubre de 2023. A cambio, Israel liberará a decenas de prisioneros palestinos. Además, Israel permitirá el ingreso de más ayuda humanitaria a Gaza y se retirará parcialmente de las principales carreteras para facilitar el regreso de los desplazados.
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La segunda fase del acuerdo, que comenzará después de 16 días de tregua, tiene como objetivo poner fin permanentemente al conflicto. En esta etapa, se espera que Hamás libere a todos los rehenes restantes, incluidos los fallecidos. Por su parte, Israel liberaría a varios cientos de prisioneros palestinos, incluidos algunos condenados por atentados mortales. Sin embargo, los combatientes de Hamás involucrados en el ataque de octubre no serán liberados en esta fase. La retirada completa de las tropas israelíes de Gaza dependerá de la liberación total de los rehenes.
La tercera fase del plan se centra en la reconstrucción de Gaza. Grandes áreas del territorio han quedado devastadas, por lo que esta etapa podría prolongarse durante varios años. Sin embargo, aún no se han negociado todos los detalles de esta fase, y quedan por resolver cuestiones clave, como quién gobernará Gaza y cómo se llevará a cabo la reconstrucción.
Este acuerdo representa un avance significativo hacia la paz en una región marcada por décadas de conflicto. La comunidad internacional ha acogido con beneplácito el cese al fuego y espera que ambas partes cumplan con los compromisos establecidos para garantizar la estabilidad y la seguridad en la zona.
No obstante, persisten desafíos importantes. La implementación efectiva de cada fase requerirá cooperación y confianza mutua, aspectos que han sido escasos en el pasado. Además, la situación humanitaria en Gaza sigue siendo crítica, y la reconstrucción demandará recursos sustanciales y coordinación internacional.
El acuerdo de cese al fuego entre Israel y Hamás ofrece una oportunidad para la paz y la reconstrucción en la Franja de Gaza. Sin embargo, su éxito dependerá de la voluntad de ambas partes para cumplir con los términos acordados y abordar las cuestiones pendientes que aún generan tensiones en la región.
Este cese al fuego no es ajeno a las controversias. Comenzando con la disputa entre el presidente saliente Joe Biden y el entrante Donald Trump sobre quién se debe llevar los aplausos por el acuerdo. Los términos del acuerdo son los mismos presentados en mayo de 2024 por el gobierno Biden, pero rechazados por el gobierno de Israel. Lo cual ha llevado a suspicacias sobre si la aceptación del acuerdo por Netanyahu es en respuesta a la presión de Trump o para hacer parte del legado de Biden.
Por el momento, aunque se celebró el acuerdo alcanzado, ya desde Tel Aviv han empezado a indicar que Hamás está incumpliendo los términos del mismo. Aún cuando el cese al fuego inicia hasta el próximo domingo 19 de enero. De otro lado, todo apunta a que Israel no dejará de bombardear Gaza hasta que comience el cese al fuego.
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También hay que añadir, que Netanyahu aplazó la votación de su parlamento para avalar el acuerdo, que estaba programada para hoy 16 de enero, hasta el día de mañana 17. Desde dentro de su gabinete hay muchas voces que piden no avalar el acuerdo, pues lo ven como una derrota o un alto en el camino en su propósito de erradicar a Hamás.
Los ojos del mundo estarán en Gaza el próximo domingo a la espera del cumplimiento e inicio del cese al fuego en medio de acciones bélicas que han sido consideradas como genocidio incluso por voces desde dentro de Israel.
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