Pese a que no se ha llevado a cabo un consenso sobre el aumento del salario mínimo para 2024, los colombianos comienzan a pensar en alzas desde ya.
Pese a que no se ha llevado a cabo un consenso sobre el aumento del salario mínimo para 2024, los colombianos comienzan a pensar en alzas desde ya.
No se ha terminado el 2023 y desde ya los colombianos piensan en cada uno de los aumentos que tendrán en 2024. Si bien la inflación en Colombia ha mostrado un descenso desde el mes de marzo, continúa en niveles altos en comparación con otros países de la región como pueden ser Brasil Chile, Perú, entre otros.
El registro más reciente es de noviembre y allí se indicó una tasa del 10,15 % anual, y se proyecta para que finales de este año se sitúe entre el 9,5 % y el 10 %. Un panorama que desafía la capacidad financiera de los colombianos ante un 2024 con pronósticos económicos inciertos.
El ajuste del salario mínimo para el próximo año se basará en la tasa de inflación actual, y pese a que no se ha llegado a un acuerdo entre las partes en este ítem, esto influirá directamente en el costo de vida de los colombianos y en los precios de bienes y servicios esenciales como el arriendo, cuotas de administración, educación, peajes, entre otros.
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El incremento del salario mínimo se reflejará en el valor de las Viviendas de Interés Social (VIS), las cuales han experimentado un aumento significativo. El precio de los combustibles, junto con el fenómeno de El Niño, también podrían ejercer una presión adicional sobre los precios al consumidor.
Además de esto, se espera que en el 2024 también se impacte con la reforma tributaria instaurada por el gobierno del presidente Gustavo Petro, lo que afectaría principalmente a las personas naturales con una reducción notable de las deducciones.
También se espera que haya una actualización de las bases de datos para asignar subsidios, lo que podría resultar en la pérdida de estos para algunas familias que ya no cumplen con los requisitos establecidos para recibir dichas ayudas.
Estos factores se combinan en un contexto desafiante para los hogares colombianos, que no solamente se deberán enfrentar al ajuste del salario mínimo y a la reforma antes mencionada, sino que también a las posibles fluctuaciones de la economía global que podría agudizar en algún momento la situación,
Los arriendos son el ítem que más preocupa a los colombianos, ya que estos significan hasta una cuarta parte del gasto de los hogares y según proyecciones, para 2024 se prevé aumentos cercanos al 10 %, por lo que, según expertos, esto llevaría a los colombianos a buscar viviendas más económicas.
La educación es otro de los puntos que tendrá aumentos, esta vez por dos vías en 2024; tarifas de instituciones privadas y costos asociados en el valor de los precios de los útiles escolares. Estos valores estarán vinculados al Índice de Precios al Consumidor (IPC), que a agosto de 2023 era del 11,43 %.
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Además, los precios de los peajes y combustibles se verán afectados por las indexaciones y políticas gubernamentales. En el caso de la gasolina, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, anunció que solamente se hará un aumento más, lo que significa un alivio en este rublo para aquellos colombianos que poseen algún tipo de vehículo.
Pero un caso muy distinto es el del ACPM, ya que el jefe de la cartera de Hacienda dijo que este combustible comenzará a aumentar de precio, lo que repercutiría en la economía de los hogares y la canasta familiar.
El fenómeno de El Niño también entra a jugar un papel esencial en los costos de los colombianos, y este sería en los alimentos y la energía en los próximos meses. Estos efectos podrían llegar en e los meses de febrero y marzo, según proyecciones de los expertos.
Por ahora, las negociaciones del salario mínimo para 2024 continúan y este tendrá la mayor implicación en la estructura de vida de los colombianos, los costos de las empresas y definición de precios en varios sectores.
También, las próximas decisiones del Banco de la República en cuanto a tasas de interés serán determinante para la política económica de los colombianos y del país.
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