Un grave revelación hizo el diario israelí Haaretz tras entrevistar a militares israelíes que indicaron que les ordenaron disparar a los palestinos que buscan ayuda humanitaria.
lunes, 30 de junio de 2025
Un grave revelación hizo el diario israelí Haaretz tras entrevistar a militares israelíes que indicaron que les ordenaron disparar a los palestinos que buscan ayuda humanitaria.
De acuerdo con un reportaje del diario israelí Haaretz, varios soldados israelíes afirmaron que recibieron órdenes de “disparar a palestinos desarmados” cuando estos intentaban acceder a los puntos de reparto de ayuda humanitaria en Gaza.
Te puede interesar: Al menos 47 muertos en Gaza tras ataques del Ejército israelí cerca de puntos de distribución de ayuda
Los testimonios revelan que los disparos ocurrieron antes de la apertura y después del cierre de los centros de ayuda, cuando no había amenazas visibles.
Un militar citado por Haaretz describió el lugar como un “campo de exterminio”, y estimó que entre uno y cinco palestinos eran asesinados diariamente en esos puntos.
Según reportes de salud de Gaza, en tan solo un mes se habrían registrado 549 muertos y más de 4.000 heridos durante estos repartos.
Las armas utilizadas por los soldados incluían ametralladoras pesadas, lanzagranadas y morteros, sin el uso de equipos de control de multitudes ni medidas no letales.
Una fuente militar explicó que el mecanismo era un método deliberado de control de multitudes, donde se usaba fuego real para “mantenerlos alejados”, sin razón legítima.
Otro soldado señaló que la operación, apodada “Operation Salted Fish”, era una táctica sistemática para disuadir y dispersar a los civiles.
Como respuesta, el ejército israelí confirmó que existe una investigación interna —ordenada por la Military Advocate General— para determinar posibles crímenes de guerra.
El primer ministro Benjamin Netanyahu y el ministro de Defensa Israel Katz rechazaron las acusaciones calificándolas de “calumnias sangrientas” y “mentiras despiadadas”.
La ONU, a través del secretario general António Guterres, advirtió que cualquier operativo que obligue a civiles a entrar en zonas militarizadas y donde se les dispare es “inherentemente inseguro”.
Médicos Sin Fronteras también condenó con dureza la situación, calificándola de “masacre disfrazada de ayuda humanitaria”.
Te puede interesar: Reacciones encontradas sobre «cese» de hostilidades entre Israel e Irán
Las revelaciones han generado un intenso debate sobre la ética militar, la protección de civiles y la necesidad de veredictos judiciales imparciales; mientras tanto, las investigaciones continúan y las ONG presionan por cambios urgentes en los protocolos de distribución de ayuda.