Con este nuevo Premio Nobel, la academia reconoce a un autor que, desde los márgenes de Europa Central, ha construido una literatura universal sobre la desolación.
Con este nuevo Premio Nobel, la academia reconoce a un autor que, desde los márgenes de Europa Central, ha construido una literatura universal sobre la desolación.
La Academia Sueca otorgó este jueves (09-10-2025) el Premio Nobel de Literatura 2025 al escritor y guionista húngaro László Krasznahorkai, reconocido por su estilo singular y su profunda exploración de los límites del lenguaje, la melancolía y la desintegración del mundo moderno.
En su comunicado oficial, la Academia destacó al autor “por su obra convincente y visionaria que, en medio del terror apocalíptico, reafirma el poder del arte”, subrayando su capacidad para combinar la desolación con una mirada poética y filosófica sobre la condición humana.
También puedes leer: Israel y Hamás alcanzaron un acuerdo para una primera fase de alto el fuego en Gaza
Krasznahorkai, considerado por la crítica internacional como el escritor húngaro más importante de su generación, ha construido una narrativa densa, irónica y profundamente introspectiva, en la que el caos y el absurdo conviven con una búsqueda espiritual constante.
“No quiero mentir. Sería muy interesante recibir este premio. Sin embargo, me sorprendería mucho si lo ganara”, dijo el autor en febrero pasado durante una entrevista en Estocolmo, en la presentación de su novela Herscht 07769, sin imaginar que meses después recibiría el máximo reconocimiento de la literatura mundial.
Nacido el 5 de enero de 1954 en Gyula, una pequeña ciudad al sur de Hungría, cerca de la frontera con Rumania, Krasznahorkai creció durante la dictadura comunista, contexto que influiría de manera determinante en su visión literaria.
Estudió Derecho en las universidades de Szeged y Budapest entre 1973 y 1978, aunque abandonó la carrera antes de graduarse. Trabajó como minero, guardia de seguridad y empleado público, hasta que decidió dedicarse por completo a la escritura.
En 1977 inició estudios de Andragogía y Filología Húngara en la Universidad de Budapest y comenzó a publicar en revistas literarias, entre ellas la prestigiosa Mozgó Világ (Mundo en Movimiento).
Su primera novela, Tango satánico (1985), le valió un inmediato reconocimiento por parte de la crítica húngara por su estilo innovador y su estructura narrativa laberíntica. Desde entonces, su obra se caracteriza por extensas frases subordinadas, una prosa hipnótica y un ritmo que imita el flujo ininterrumpido del pensamiento humano.
“El lenguaje, en su forma más pura, no puede ser fragmentado”, ha dicho el escritor. “Las frases cortas son un artificio; la mente piensa de forma continua, no en pausas”.
Tras el final del régimen comunista, Krasznahorkai comenzó a viajar y residir en diversos países durante los años ochenta y noventa, entre ellos Alemania, Francia, España, Italia, Grecia, Países Bajos, Reino Unido, Estados Unidos, China y Japón, aunque siempre regresaba periódicamente a Hungría.
Durante ese periodo inició una fructífera colaboración con el cineasta Béla Tarr, con quien coescribió los guiones de Tango satánico y Armonías de Werckmeister, ambas adaptaciones cinematográficas de sus novelas. Su vínculo con Tarr consolidó su reputación internacional como un autor de culto entre lectores y cinéfilos.
Su obra combina una visión apocalíptica del mundo moderno con un humor sombrío y un estilo de escritura que prescinde a menudo de puntuación, lo que exige del lector una atención sostenida. Sus temas recurrentes —la decadencia moral, el fin de la civilización, la búsqueda de redención— reflejan tanto la experiencia del comunismo como su desencanto frente a la modernidad occidental.
Te puede interesar: Premio Nobel de Química 2025 reconoce el desarrollo de estructuras metal-orgánicas con potencial revolucionario
Krasznahorkai ha reconocido la influencia de la cultura asiática, especialmente la japonesa, en su visión filosófica y estética. “En Oriente descubrí que la quietud puede ser tan profunda como el movimiento”, ha expresado.
En el ámbito hispano, sus libros más conocidos incluyen Melancolía de la resistencia (2001), Al norte la montaña, al sur el lago, al oeste el camino, al este el río (2005), Guerra y guerra (2009), Ha llegado Isaías (2009), Y Seiobo descendió a la Tierra (2015), Tango satánico (2017), Relaciones misericordiosas (2023) y El barón Wenckheim vuelve a casa.
Sus obras han sido traducidas a más de veinte idiomas y galardonadas con premios como el Man Booker International (2015), el Premio Nacional de Literatura de Hungría y el Premio de Leipzig a la Comprensión Europea.
Con este nuevo Nobel, la Academia Sueca reconoce a un autor que, desde los márgenes de Europa Central, ha construido una literatura universal sobre la desolación, la ironía y la fe en la palabra escrita como último refugio frente al caos.
BREAKING NEWS
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 9, 2025
The 2025 #NobelPrize in Literature is awarded to the Hungarian author László Krasznahorkai “for his compelling and visionary oeuvre that, in the midst of apocalyptic terror, reaffirms the power of art.” pic.twitter.com/vVaW1zkWPS