El conflicto sirio se reactiva en medio de un Medio Oriente convulsionado. HTS se hizo con la segunda ciudad más grande de Siria.
El conflicto sirio se reactiva en medio de un Medio Oriente convulsionado. HTS se hizo con la segunda ciudad más grande de Siria.
El grupo extremista Hayat Tahrir al-Sham (HTS) ha intensificado sus operaciones militares en el norte de Siria, expandiendo su influencia más allá de sus bastiones tradicionales en Idlib. En las últimas semanas, han lanzado ofensivas hacia la periferia de Alepo, capturando algunos barrios clave como Al-Hamdaniya y Nuevo Alepo. Esta expansión ha derivado en intensos combates con las fuerzas del gobierno de Bashar al-Ásad, respaldadas por Rusia e Irán, lo que ha generado una creciente crisis humanitaria en la región.
Las fuerzas de HTS, apoyadas por otras facciones rebeldes, han utilizado tácticas como dobles atentados suicidas y bombardeos intensivos, logrando avances significativos. Se estima que los enfrentamientos han dejado más de 250 muertos, entre ellos civiles, militares sirios y combatientes del grupo. La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) reportó que alrededor de 14,000 personas han sido desplazadas debido a la violencia.
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El conflicto ha paralizado las operaciones de más de 30 organizaciones no gubernamentales en Idlib, lo que agrava la situación humanitaria. También se han suspendido actividades en 24 centros de salud, incluidos hospitales cruciales como el de Bab al-Hawa. La ofensiva actual es una de las más grandes desde el alto el fuego mediado por Rusia y Turquía en 2020.
HTS ha utilizado armamento pesado y drones en sus ataques, mientras las fuerzas sirias han respondido con bombardeos aéreos y ofensivas terrestres. La región de Alepo sigue siendo estratégica para ambas partes debido a su importancia económica y militar. El Ejército sirio ha declarado que han recuperado algunas posiciones y destruido varios vehículos enemigos.
Las tropas gubernamentales enfrentan grandes desafíos, ya que HTS cuenta con combatientes extranjeros y el apoyo logístico de otras facciones insurgentes. Esta expansión amenaza con desestabilizar las ya frágiles zonas controladas por el gobierno, dificultando la reconstrucción y la entrega de ayuda humanitaria.
La situación en Alepo es especialmente preocupante debido a la concentración de población civil y el riesgo de que las infraestructuras críticas sean destruidas. Naciones Unidas ha hecho un llamado urgente a la protección de los civiles y a garantizar el acceso humanitario. La OCHA advirtió que la mitad de los desplazados son menores, lo que agrava la crisis social en la región.
Esta ofensiva también ha tenido un impacto político significativo. El gobierno sirio acusa a HTS de violar los acuerdos de alto el fuego, mientras que HTS justifica sus acciones como una respuesta a los recientes ataques aéreos de las fuerzas sirias y rusas en Idlib. La escalada actual refleja la fragilidad de los acuerdos internacionales y la complejidad del conflicto sirio.
En términos estratégicos, HTS busca consolidar su control en áreas más allá de Idlib, con la intención de establecer una mayor influencia territorial. Sin embargo, la ofensiva ha provocado una respuesta feroz de las fuerzas gubernamentales, lo que podría conducir a un nuevo ciclo de violencia prolongada.
El contexto actual muestra que la paz en el norte de Siria sigue siendo difícil de alcanzar. La presencia de múltiples actores, incluidos milicias extranjeras y potencias internacionales, complica aún más las negociaciones de alto el fuego. La comunidad internacional sigue presionando por una solución diplomática, pero los enfrentamientos recientes indican que el camino hacia la estabilidad será largo y arduo.
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La situación en Alepo podría tener repercusiones más amplias en el conflicto sirio, afectando tanto las dinámicas internas como las relaciones con actores externos como Turquía y Rusia. La expansión de HTS representa una amenaza significativa para la seguridad regional, con posibles implicaciones para los países vecinos. Cabe recordar que HTS es un derivado de Al Qaeda, lo cual podría generar un riesgo similar al ocurrido con ISIS en Iraq y Siria.
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