En un acto simbólico en la Quinta de Bolívar, el presidente Gustavo Petro sancionó la Reforma Laboral y la Ley de Salud Mental.
En un acto simbólico en la Quinta de Bolívar, el presidente Gustavo Petro sancionó la Reforma Laboral y la Ley de Salud Mental.
En medio de un acto simbólico en la histórica Quinta de Bolívar, ubicada en el centro de Bogotá, el presidente Gustavo Petro sancionó oficialmente la Reforma Laboral, recientemente aprobada por el Congreso de la República. La ceremonia, cargada de referencias históricas y políticas, tuvo como objetivo resaltar el carácter transformador de la iniciativa y su importancia para el gobierno del Cambio por la Vida.
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Durante el mismo evento, el mandatario también otorgó la sanción presidencial a la Ley de Salud Mental. Esta ley busca fortalecer la atención integral en salud mental y garantizar el acceso universal a tratamientos, con enfoque comunitario y preventivo.
En su intervención, Petro calificó la aprobación de la Reforma Laboral como un “gran triunfo” para la clase trabajadora colombiana. Según sus palabras, esta representa el inicio del proceso para recuperar los derechos laborales que —según él— fueron recortados por los gobiernos neoliberales a lo largo de las últimas décadas.
El presidente señaló que la reforma es solo el primer paso de una transformación más profunda, que implique incluir nuevos derechos laborales. En ese sentido criticó que hubiesen retirado de la reforma las licencias menstruales y la ampliación de la licencia de paternidad.
Uno de los momentos clave del discurso fue cuando Petro urgió a la Corte Constitucional a remitir nuevamente a la Cámara de Representantes la Reforma Pensional, luego de que fuera detenida por vicios de forma en su trámite legislativo. Afirmó que se trata de una necesidad urgente para garantizar la seguridad económica de los adultos mayores.
Irónicamente esta devolución de la reforma pensional daría tiempo al Gobierno Nacional de resolver problemas técnicos para poder implementar la reforma, en especial lo referente a la capacidad administrativa y tecnológica de Colpensiones.
Sobre la Reforma a la Salud, Petro reiteró su llamado al Congreso para que la apruebe. Advirtió que, si no se logra por la vía legislativa, el Ejecutivo asumirá la responsabilidad de avanzar en los cambios necesarios. “La salud es un derecho, no un negocio”, dijo, reiterando una de sus consignas más repetidas.
El mandatario aprovechó el acto para aclarar rumores sobre sus intenciones políticas. Negó estar buscando la reelección y subrayó que su interés en una posible asamblea constituyente no tiene como objetivo modificar los períodos presidenciales. Reiteranfo que no quiero reelegirse y que lo que busca es que si se aplique la Constitución de 1991.
Para Petro, la actual Carta Magna no está siendo aplicada de forma integral. Mencionó que muchas de sus disposiciones sobre derechos sociales y participación ciudadana permanecen en el papel, sin traducción real en la vida de los colombianos. Por ello, dijo, se requiere un cambio constitucional profundo.
El mandatario destacó que la Reforma Laboral es un hito del Gobierno del Cambio, y responde a las demandas de sectores sociales históricamente excluidos. Aseguró que estas leyes son el resultado de años de lucha de organizaciones sindicales.
En el auditorio se encontraban representantes de centrales obreras, asociaciones de trabajadores y colectivos de salud mental, quienes celebraron la sanción de las leyes como un avance histórico en la agenda social del país.
Sin embargo, sectores empresariales y de oposición han expresado su preocupación por los impactos de la reforma. Algunos gremios consideran que la ley podría afectar el empleo formal y aumentar los costos laborales. El Gobierno ha respondido que la prioridad es la dignificación del trabajo y la reducción de la precariedad.
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La Quinta de Bolívar, sitio donde se llevó a cabo la ceremonia, fue elegida simbólicamente como escenario de este acto. La conexión entre el pasado libertador y las luchas sociales contemporáneas fue uno de los ejes de su discurso.