Más de 750 artistas y 58 bandas desde 12 países subieron a los escenarios de Rock Al Parque 2024.
Más de 750 artistas y 58 bandas desde 12 países subieron a los escenarios de Rock Al Parque 2024.
Rock al Parque celebró su versión XXVIII con una asistencia récord de más de 300 mil personas, consolidándose como uno de los festivales de rock más importantes de Latinoamérica. Este evento, realizado durante tres días en el Parque Simón Bolívar, fue un homenaje a los sonidos pesados del rock y sus múltiples subgéneros, reuniendo a 750 músicos de 58 bandas provenientes de más de 12 países, en este Rock Al Parque 2024.
A pesar de las inclemencias climáticas, el público bogotano asistió masivamente a esta cita anual. En total, participaron 20 bandas distritales, 9 nacionales y 29 internacionales, lo que permitió una amplia representación de discursos musicales y subculturas del rock. Esto reafirma la importancia de este evento como un espacio para la diversidad cultural.
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El sábado estuvo marcado por los sonidos pesados, destacándose actuaciones de Haggard, Hypocrisy y Testament, que ofrecieron una experiencia inolvidable para los amantes del thrash y el heavy metal. Además, el regreso de La Pestilencia después de 10 años fue uno de los momentos más emotivos, especialmente con temas icónicos como Soldado mutilado y Vive tu vida.
El domingo cambió de tono con géneros como el ska, el indie, el blues y el reggae. En esta jornada brillaron artistas como Quique Neira, exvocalista de Gondwana, y la banda caleña Superlitio, que pusieron a cantar y bailar al público. El cierre estuvo a cargo de Todos tus muertos, mientras que en otros escenarios se destacaron artistas como Doro, la «reina del heavy metal».
El lunes, la energía se elevó al máximo con más de 140.000 asistentes en el Parque Simón Bolívar. La Burning Caravan deslumbró con su mezcla de rock, jazz y música balcánica, mientras que Doctor Krápula y Los Toreros Muertos animaron al público con sus éxitos más conocidos. El gran cierre estuvo a cargo de Mago de Oz, quienes hicieron vibrar a los asistentes con su heavy metal en español.
En el escenario Bio, la presencia femenina fue notable con artistas como la argentina Fabiana Cantilo y la banda Eruca Sativa, que interpretaron el himno feminista Canción sin miedo. En el escenario Eco, las colombianas Lilith y Linda Habitante destacaron con sus estilos únicos, reafirmando el talento local.
El festival se caracterizó también por su compromiso con la representación femenina, contando con artistas como The Selecter, liderada por Pauline Black, y Highway, la primera banda colombiana de heavy metal liderada por mujeres. Además, Gabriela Ponce, compositora y clarinetista, dejó una fuerte impresión en el público.
Aún así la propia Gabriela, fue una de las que criticó la reducción en el porcentaje de mujeres en el escenario que bajó al 11% en comparación con años anteriores. La vocalista de Margaritas Podridas de México, Carolina Enríquez recalcó que sentía que el espacio entre las tarimas y el público era demasiado amplio contrario a lo que han experimentado en otros festivales.
Algunas personas asistentes también retomaron la crítica sobre las pocas facilidades para personas en condición de discapacidad. Pues el desplazamiento y el acceso a las zonas destinadas para tal fin es complicado y aún más con lluvia. Algo que se ha insinuado incluso en festivales privados como Estéreo Pícnic.
Por otro lado, en la Zona de Experiencias Electrolit, los asistentes pudieron disfrutar de fusiones musicales de DJs y bailar al ritmo del rock. Este espacio alternativo permitió a los asistentes explorar otras formas de disfrutar del festival.
El evento también ofreció una Zona de Arte y Emprendimiento con más de 40 stands, donde los asistentes adquirieron productos relacionados con el rock como camisetas y stickers. Esta zona generó ganancias superiores a los $201.000.000, mostrando el impacto económico del festival.
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Por otro lado, Rock Al Parque 2024 incluyó una completa programación académica, con la participación de 365 personas, y un concierto sinfónico que reunió a 697 asistentes, ofreciendo un componente educativo y cultural adicional al festival.
Así, Rock al Parque reafirmó su posición como un símbolo de Bogotá, un espacio que celebra la música, el arte, la diversidad y la unión social. Año tras año, este festival sigue escribiendo la historia del rock en Colombia, marcando un hito en el panorama cultural de la región.
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