La Ley Ferroviaria del Gobierno Nacional ya tiene ponencia positiva en Comisión VI de Senado de la República, para ser debatida.
La Ley Ferroviaria del Gobierno Nacional ya tiene ponencia positiva en Comisión VI de Senado de la República, para ser debatida.
La Comisión Sexta del Senado tiene lista la ponencia positiva para el primer debate del proyecto de Ley Ferroviaria, propuesto por el Ministerio de Transporte. Esta iniciativa busca establecer instrumentos legales y técnicos para la reactivación del modo ferroviario en Colombia, con el objetivo de mejorar la competitividad del sector logístico.
El proyecto de ley, presentado por tercera vez al Legislativo, pretende reducir en un 22% las emisiones de CO₂. Además, se integrará con otros modos de transporte para crear una red logística eficiente y sostenible que optimice la infraestructura de movilidad del país.
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Actualmente, Colombia cuenta con 3.533 km de línea férrea. De estos, 1.610 km son administrados por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), 1.734 km por el Instituto Nacional de Vías (Invías) y 189 km por el sector privado. Esta infraestructura será clave para implementar los cambios propuestos por la ley.
El proyecto de ley No. 232 de 2024 establece las condiciones para el desarrollo de una infraestructura ferroviaria moderna. También regula la prestación del servicio público de transporte ferroviario de carga y pasajeros. Además, dicta lineamientos para la construcción, mantenimiento y operación de estas redes, conectando centros de producción con puertos y regiones de consumo.
Entre los objetivos está fomentar la intermodalidad, interoperabilidad y complementariedad del transporte, garantizando una reactivación sostenible y eficiente del sistema férreo. Se busca un ordenamiento institucional que facilite el desarrollo y financiamiento de proyectos de este tipo.
Según el Ministerio de Transporte, el uso del sistema ferroviario reduce los costos operativos y logísticos, disminuye la congestión vehicular y ayuda a combatir la contaminación ambiental. Esto beneficiará tanto a pasajeros como a empresas, mejorando el acceso a una movilidad más eficiente.
De acuerdo con la ponencia, se espera que para 2030 los costos logísticos se reduzcan del 17,9% actual al 9,5%, acercando a Colombia a los estándares de los países de la OCDE. Esto promoverá el desarrollo regional, generará empleo y fortalecerá uno de los motores económicos del país.
La implementación del proyecto de ley permitirá reducir en un 26,2% el costo del transporte y disminuir en un 23,5% los tiempos para el comercio exterior, lo que favorecerá la integración regional y hará más eficiente el flujo de mercancías hacia mercados internacionales.
El proyecto también impulsa una política de Estado para fomentar inversiones en infraestructura, tecnología y modernización del sistema ferroviario. Esto se hará siguiendo normas internacionales, garantizando una expansión de la red férrea con altos estándares de calidad y seguridad.
Otro de los objetivos clave es promover el transporte intermodal y posicionar a Colombia como un puerto de transferencia de carga internacional en la región, mejorando la conectividad y el comercio entre países vecinos.
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La propuesta incluye la creación de una Agencia Nacional de Ferrocarriles, que será fundamental para centralizar y optimizar la planificación, operación y mantenimiento de la red ferroviaria. Esta entidad garantizará una gestión más eficiente y ordenada del sistema férreo nacional.
Además, se plantea la actualización del Plan Maestro Ferroviario, que servirá para guiar el desarrollo del sistema a corto, mediano y largo plazo. Este plan asegurará una visión sostenible y continua, sin importar los cambios en el gobierno.
La exposición de motivos del proyecto destaca que la inversión en infraestructura ferroviaria ha sido históricamente insuficiente. Desde 2010, Colombia ha destinado menos del 1,8% de los recursos públicos, aproximadamente 247.000 millones de pesos anuales, de los cuales 175.000 millones son aportados por el sector privado y 75.000 millones por el sector público.
Para aumentar esta inversión, el proyecto fomenta la cooperación público-privada y ofrece incentivos fiscales y créditos preferenciales. De esta manera, se busca estimular la participación del sector privado, que no solo aportará capital, sino también experiencia y eficiencia. Este modelo, probado con éxito en América Latina, podría ser clave para el desarrollo ferroviario colombiano.
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