Hablar de Laura Sarabia es hablar de la mujer en el poder en la Casa de Nariño. Es hablar de la persona más cercana al presidente. Es decir, quien rodea al presidente. En otras palabras, el hablar de sobre quien le habla al oído al primer mandatario de los colombianos.
Y es que desde que asumió el poder, el presidente Gustavo Petro ha estado acompañado una mujer a todo lado. Una figura femenina lo sigue, lo guía y pone en orden la casa cuando todo parece descarrilarse. Ella Laura Sarabia, la mujer detrás del poder en el Palacio.
Y es que Sarabia siempre ha estado ahí, al lado del presidente sin importar el costo político, incluso los escándalos, como el de su exniñera Marelbys Meza. Escándalo que la sacó de la jefatura de gabinete y cuando todos pensábamos que era el fin junto a Petro, apareció de la nada y volvió a estar cerca del presidente, en ese momento incluso con más poder; había llegado al Departamento de Prosperidad Social.
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Se ha presentado ante la Fiscalía, ha mostrado la cara ante los medios, se ha dado a conocer fácilmente, algo que muy pocos logran en tan poco tiempo. Incluso, algo que muchos no quisieran hacer.
Pero la estocada final para regresar al Palacio fue en el viaje del presidente Petro a Alemania para la Cumbre de Seguridad de Múnich. Allí no se vio al entonces director del DAPRE Carlos Ramón González, por el contrario, Sarabia siempre estuvo acompañando al mandatario de los colombianos.
Por los pasillos de la Casa de Nariño corrieron varios rumores, incluso un medio internacional se atrevió a asegurar que la relación entre Sarabia y González no era buena, todo por quedarse con el favoritísimo del presidente. Algo que logró la hoy nueva directora del DAPRE.
Pero Laura Sarabia no solamente tiene el don de hablarle al oído al presidente, pues desde su llegada al Palacio ha tenido el poder, incluso cuando se pensó que no volvería, llegó al DPS, donde manejaba un presupuesto de 6.750 millones de dólares. Incluso desde ahí manejaba la agenda de Petro.
Ahora bien, algo debe hacer bien en su trabajo para que el presidente no quiera prescindir de ella, o simplemente debe saber algo que al mandatario no le conviene que se sepa y por eso la mantiene a su lado. Eso solo lo sabe ella y él.
Su cuerpo se pudo haber marchado de Casa Nariño, pero su sombra siempre estuvo ahí, rondando cada esquina, cada oficina y ahora volvió para estar más cerca de Gustavo Petro. Su oficina queda justo al lado del despacho del presidente.
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Pero cómo llegó Sarabia a ser tan cercana de Petro. Lo primero que hay que decir es que ella trabajó en la UTL, Unidad de Trabajo Legislativo, de Armando Benedetti, y de ahí se fue ganando la confianza del hoy mandatario, tanto así que su primera entrada en Palacio fue como jefa de gabinete, cargo que tuvo que dejar el 29 de mayo de 2023 por el escándalo de la prueba de polígrafo ilegal a su exniñera Marelbys Meza.
Este caso sigue abierto y mientras avanzan las “investigaciones” sobre lo sucedido, el presidente sigue confiando en ella, tanto así que algo más de tres meses de haber estallado el tema del polígrafo, regresó al lado del mandatario.
Pasó el tiempo y solamente en algo más de cuatro meses no solo se acercó más al presidente, sino que también llegó para tener más del que tenía antes. Ahora es la directora del DAPRE, le habla al oído a Petro, le organiza la agenda y lo acompaña a todo lado.
Con este nombramiento, Laura Sarabia ocupará su tercer cargo en el Gobierno Nacional, también desempeñará las funciones de jefe de gabinete y para rematar tendrá voz de mando sobre los ministros.
