La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas, OCHA, entregó su más reciente informe donde señaló que en lo corrido de 2024 3.900 personas han sido víctimas de desplazamiento forzoso en Colombia.
“Llama la atención que, aunque las diferentes acciones armadas reportadas en enero dan cuenta de una disminución del 32 %, los combates tuvieron un aumento del 167 % mientras que los enfrentamientos entre grupos armados no estatales disminuyeron en un 70 %, pero fueron la causa de emergencias masivas, entre otros ataques contra la población”, señaló la OCHA.
En materia de confinamientos, según las estadísticas de la Oficina concluyeron que alrededor de 8.600 personas han sufrido alguna restricción total o casi total de su movilidad en departamentos como Chocó y el sur de Bolívar. Al mismo tiempo, al menos 36.600 ciudadanos sufrieron algún tipo de restricción a la movilidad por la situación de violencia en zonas rurales.
Te puede interesar: La historia de Alexander Orozco, el soldado infiltrado de las disidencias
Pero al margen de dichas situaciones, cabe resaltar que desde la oficina señalaron que hubo una reducción de las masacres en un 71 %, así como las amenazas en un 60 %.
“Contrario a lo anterior, ha habido aumentos considerables en incidentes como homicidios de personas protegidas (31 %), secuestros (6 %), ataques (44 %) y eventos de reclutamiento y desvinculación de niños y adolescentes (17 %)”, señaló el informe.
Cabe recordar que hace unas semanas, La OCHA también entregó el informe sobre Tendencias e Impacto Humanitario en Colombia 2023, un trabajo que muestra el drama de las poblaciones que se han visto afectadas por los actores armados del conflicto.
De acuerdo con los datos revelados dentro del informe, entre enero y diciembre de 2023, un total de 63.249 personas vivieron desplazamientos masivos y 100.005 desplazamientos individuales. 88.007 personas fueron confinadas forzosamente, lo que generó que 250.000 resultaran afectadas en 204 emergencias humanitarias de este tipo.
El reporte reveló que las comunidades más afectadas siguen siendo las rurales, indígenas y afrodescendientes de zonas como la región Pacífico, el corredor Noroccidental, la Frontera con Venezuela y la Amazonía.
Pese a que la cifra revelada por la OCHA fue elevada, el informe aseguró que se vio una reducción de personas confinadas del 14 % en 2023, ya que para 2022 la cifra estaba en 102.286; mientras que los desplazamientos masivos presentaron una disminución 23 %.
También puedes leer: Cali será la sede de la COP 16, cumbre mundial de biodiversidad
También agregaron que son los departamentos del Pacífico, así como el Putumayo, La Guajira, Cesar, Arauca, Huila, Caquetá y Amazonas, los más afectados junto con los del Noroccidente.
“Llama la atención el segundo semestre por el aumento considerable de estas víctimas, especialmente en los meses de julio y noviembre, causado por el interés de los Grupos Armados No Estatales (Gane) en controlar corredores de movilidad y las rentas derivadas de economías ilegales en zonas estratégicas”, detalló el informe.
Según la OCHA, los acuerdos de cese al fuego bilateral impactaron de manera significativa para la reducción de las cifras de violencia y enfrentamientos entre la Fuerza Pública y los grupos armados al margen de la ley, en un 33% respecto a 2022; sin embargo, añadieron que los enfrentamientos armados entre los mismos grupos criminales mantuvo una tendencia elevada como en 2022.
